Obras, obras y obras.
Las grandes ciudades se llenan de trabajadores que a diario nos llenan las calles de polvo, máquinas y ruidos. Algunos cumplen con las medidas de seguridad llevando casco, arnés, botas de seguridad, etc. Otros las incumplen, y a diario es raro no conocer algún caso de accidente laboral. En este oficio entre hierros y ladrillos es a veces cuestión de suerte. Va por ustedes.
Foto: Juan Carlos Soler
No hay comentarios:
Publicar un comentario